Miguel Antonio Noriega Del Águila destaca como un joven escritor de notable imaginación y sensibilidad narrativa. Creador de «El lobo comedor de manzanas» y «Miguel y la planta mágica», construye universos mágicos donde la fantasía se entrelaza con profundos valores humanos, logrando conectar tanto con el corazón de los niños como con el espíritu de los adultos.